AVANCE I

No ha sido fácil andar contigo. Eres muy diferente de como crees que eres. Eres menos ingenua de lo que te piensas, más linda de lo que tu espejo te dice. Mucho más. Tu capacidad de amar es  literalmente increíble y también tu capacidad de odiar, con la diferencia de que odias un instante y amas para siempre (a veces a la misma persona). Sabes usar la palabra para levantar y también para hundir. Eres muy escrupulosa y demasiado sensible. Esa particular capacidad de no hacer amigos, ni aceptar cualquier amistad  es más perversa de lo que tú crees. Esa desconfianza desmedida en  todo aquel te elije y esa confianza ciega en todo aquel que tú elijes son, te lo he repetido mil veces, extremos peligrosos. Es muy tuya esa costumbre casi sagrada de alejar a las personas con tu trato canónico, con tu obediencia incorruptible, con tu aburrida formalidad, piensas que todos pueden ver lo que sientes y pretendes que respondan a ello más que al trato que les profesas, aunque te haya dicho un montón de veces más que no funciona así. Con todo, has tenido la recompensa de encontrar personas excepcionales en todos los ámbitos de tu vida, sí, ¡la recompensa! porque eres excepcional y lo sabes (aunque tus escrúpulos, que son más grandes que tu humildad, te impidan hacer alarde de ello). Me encanta tu manera de detectar la estupidez, la inmadurez emocional, la pequeñez y la fealdad interior y guardar silencio y aguardar el cambio, y creer que todo se transforma (incluso eso) y alejarte  (o no acercarte) conservando la esperanza de que todo se transforma. Me encanta más aún la forma tan bonita en que admiras y vibras de emoción en silencio ante un alma pura o grandiosa o resiliente…  En silencio, siempre en silencio, hasta que yo hablo por ti. No ha sido fácil andar contigo, pero tengo, hasta ahora, un bonito informe que presentar de ti. Sigue así. Vas muy bien.

Tu Alter Ego.